Ayer nos lanzamos a ver el concierto de Peter Bjorn and John en el lunario del Auditorio Nacional, debo reconocer que fuimos por invitación de un amigo, no porque los conociéramos o tuviéramos interés en verlos, sin embargo pasámos un muy buen rato y nos llevamos una grata sorpresa al escuchar a esta banda sueca; todo el espectáculo consistió en la música y la presencia de Peter sobre todo, el comportamiento fue muy amistoso y cálido... hasta la última canción, donde aparentemente perdió la cabeza (o tal vez así era la canción) y termino aventando la batería contra el piso y haciendo desmadre y medio para salir sin despedirse...
Por supuesto, cuando escuchamos los discos de estudio, no suenan para nada igual, así que me quedaré con el recuerdo nada más.
A propósito... les abrió una banda mexicana llamada "Six Million Dollar Weirdo"... y la diferencia entre una banda y otra es que esta última utiliza demasiadas cosas para llamar la atención, incluido el agredir al público, motivo por el cuál la rechifla no se hizo esperar, terminaron por bajarle un poco y entonces prendieron más a la gente...
Pienso que la gente ya no quiere más rockstars inalcanzables, me parece que la mejor manera de ganarse al público es siendo más humildes y humanos...
Interesante
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